Situado en el centro histórico de Ibiza, el Hotel Mirador de Dalt Vila es un oasis de lujo y serenidad que captura la esencia de la isla.Este majestuoso palacete del siglo XIX, erigido en 1904, forma parte de la historia viva de Ibiza. Originalmente residencia de la familia Fajarnés, ha sido cuidadosamente restaurado para convertirse en un hotel de cinco estrellas sin perder un ápice de su carácter señorial y encanto histórico.
Ubicado dentro de las impresionantes murallas renacentistas de Dalt Vila, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el hotel ofrece a sus huéspedes una experiencia única. Desde sus instalaciones se contempla el espectacular paisaje que rodea al Puig de Vila, coronado por la icónica catedral y el castillo de Ibiza. Este entorno privilegiado permite a nuestros visitantes sumergirse en siglos de historia y cultura mediterránea, mientras disfrutan de la comodidad y el lujo de una estancia inolvidable.
El Hotel Mirador de Dalt Vila ha sido diseñado para aquellos que buscan una experiencia verdaderamente exclusiva y personalizada. Con solo 12 habitaciones, incluyendo una Gran Suite, Suite, Junior Suites, habitaciones dobles e individual, este íntimo refugio garantiza una atención detallada y un ambiente de privacidad incomparable. Cada estancia ha sido decorada con materiales nobles como mármol, ónix verde y piedras semipreciosas, integrando a la perfección la elegancia clásica con las comodidades contemporáneas. La cuidada decoración respeta el carácter histórico del edificio, al tiempo que incorpora las últimas tecnologías para asegurar el máximo confort.
A lo largo de su transición de palacete familiar a hotel de lujo, el Mirador de Dalt Vila ha conservado su esencia original, exhibiendo con orgullo su mobiliario de época y su colección de obras de arte. La perfecta fusión entre lo antiguo y lo moderno se refleja en cada rincón del hotel, desde los detalles arquitectónicos hasta la delicadeza de su diseño interior. Aquí, los huéspedes no solo disfrutan de una estancia de lujo, sino también de una inmersión cultural en la historia de Ibiza.
Ya sea disfrutando de un desayuno exquisito, una cena gourmet en nuestro restaurante Can Font, o de un momento de ocio en nuestro cocktail bar, cada detalle ha sido pensado para ofrecer una atmósfera de refinamiento y bienestar.
Dalt Vila, con sus calles empedradas y su rica mezcla de culturas, es el escenario ideal para quienes desean explorar la auténtica Ibiza. Y al regresar al hotel, nuestros huéspedes encuentran un remanso de paz, lujo y comodidad, rodeados de un entorno que combina a la perfección el patrimonio histórico con las comodidades más modernas.
En el Hotel Mirador de Dalt Vila, cada estancia es una celebración de la exclusividad, el lujo discreto y la atención personalizada, todo ello enmarcado por la belleza incomparable del casco antiguo de Ibiza. Les invitamos a descubrir una experiencia única, donde el pasado y el presente se entrelazan para crear recuerdos imborrables.
en todas las áreas del hotel
del casco antiguo de Ibiza
Con tan solo 12 habitaciones